Cinco rutas para descubrir la vertiente cántabra de los Picos de Europa
Declarado Reserva de la Biósfera por la Unesco por la belleza de sus paisajes y la riqueza de sus ecosistemas, este Parque Nacional es uno de los grandes tesoros naturales de España. Aquí te mostramos cinco recorridos para inspirarte andando por sus paisajes de ensueño, a los que puedes llegar desde 4.500 Avios (por trayecto).
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1 Ruta Horcados Rojos, para los más atrevidos
Partiendo desde El Mirador del Cable, la estación superior del teleférico de Fuente Dé, esta ruta recorre una senda de alta montaña que lleva al collado de los Horcados Rojos, un balcón natural a 2.343 metros con vistas espectaculares del macizo Central de los Picos de Europa. A lo largo del ascenso, de dificultad media y algo más de 11 kilómetros de ida y vuelta, se pueden apreciar paisajes rocosos, valles, pedreros, pendientes sinuosas y lagunas glaciares.
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2 Ruta Puertos de Áliva, senderismo con niños
Tras salvar, también, en el teleférico de Fuente Dé los 753 metros de desnivel –tarda unos 4 minutos–, se parte en esta ruta emblemática, aunque en dirección contraria. De baja dificultad, el trayecto arranca con un breve ascenso entre montañas peladas hasta la Horcadina de Covarrobres, y después desciende entre los extensos prados de los macizos Central y Oriental de los Picos de Europa. A continuación, el sendero se abre camino entre los increíbles bosques del Pico de Valdecoro, y luego se convierte en una pista ancha y cómoda que termina donde comenzó: en el parador de Fuente Dé.
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3 Ruta Macizo de Ándara, un camino por la historia
La extracción de minerales durante la segunda mitad del siglo XIX y principios del XX dejó sus huellas en el corazón del macizo Oriental de los Picos de Europa, en forma de una red de caminos mineros abiertos en las laderas que ofrecen una ventana al pasado. Esta ruta, de dificultad media y de 25 kilómetros de largo, va desde la localidad de Bejes al centro del macizo de Ándara, en un recorrido que combina belleza natural e historia. A su vez, este itinerario lleva al senderista a pasar por los pies de la Sierra de la Corta, recorriendo paisajes indescriptibles como los que ofrecen los hayedos de Valdediezma y La Llama. El recorrido concluye en Vao de los Lobos.
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4 Ruta de los Acebos de Espinama, un camino fácil
Esta ruta circular empieza y termina en Espinama, un pueblo ubicado en la comarca cántabra de Liébana conocido por su cuidada arquitectura popular. El trayecto, de unos 12 kilómetros y considerado de baja dificultad, atraviesa el pueblo de Pido por el camino conocido como La Gatera, y después cruza algunos parches de bosques desde donde sorprenden unas vistas espectaculares del pico Coriscao. Más adelante, el recorrido pasa por las Portillas del Boquerón, que son la puerta de entrada de los Puertos de Áliva, y concluye en un sobrecogedor bosque de acebos que se extiende casi hasta el propio pueblo de Espinama.
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5 Ruta Hayedo de las Ilces, perfecta para hacer en familia
Se trata de otra de las impresionantes rutas circulares que parten desde el pueblo de Espinama. De dificultad media y poco más de 10 kilómetros, este itinerario atraviesa los pueblos de Pido y Las Ilces, e introduce al caminante en el valle de Camaleño, hogar de bosques de robles y hayas. La pista también lleva a través de prados, valles, riegos y arroyos que bajan de las elevadas cumbres de las montañas, y permite disfrutar del esplendor de la naturaleza. En la zona, considerada una de las mejor conservadas de los Picos de Europa, habitan todavía los osos de la Cordillera Cantábrica.