Glamping: lujo al natural
En los últimos años, la popularidad del glamping no ha dejado de crecer, como demuestran las 4.5 millones de publicaciones en Instagram etiquetadas bajo este término. Esta modalidad de viaje propone una experiencia donde se combina lo mejor de la acampada tradicional en plena naturaleza con las condiciones propias de un hotel de lujo. De hecho, esta es la base etimológica del término glamping, que surgió a finales del siglo XIX para definir los 'glamorous campings’ que los británicos de clase alta levantaron en distintas partes de África para intentar seguir de la manera más cómoda posible los pasos de exploradores como David Livingstone. Hoy se ha convertido en una opción versátil perfecta para escapadas románticas, viajes con niños e incluso momentos de reconexión con la naturaleza. Te mostramos aquí algunos de los glampings más impresionantes de Europa.
El especial entorno natural del norte de la península ibérica hace de la España septentrional el destino perfecto para los amantes del glamping. Un gran ejemplo lo constituyen las tiendas de Kampaoh Bayona, ubicadas en el centro de las Rías Baixas a menos de media hora en coche de la ciudad de Vigo. Lo más especial de este camping es que se encuentra en plena costa, lo que le convierte en un lugar apto tanto para los que quieren relajarse bajo el sol como para aquellos que disfrutan de los deportes a la orilla del mar, incluyendo a los más pequeños, que pueden tirarse en tirolina en el parque infantil o en los toboganes de la piscina. En sus tiendas pueden alojarse de 2 a 4 personas e incluyen un equipamiento muy completo con camas con colchón viscoelástico, luz interior y exterior, enchufes, menaje, toallas de playa…

A la entrada del Parque Natural de Bardenas Reales (declarado Reserva de la Biosfera en el año 2000), muy cerca de Tudela, en Navarra se encuentra Aire de Bardenas, un imponente emplazamiento para alejarse del ruido del día a día en medio del majestuoso paisaje semidesértico. Con un diseño arquitectónico sensiblemente integrado en el entorno que le ha valido numerosos reconocimientos internacionales y un servicio muy cuidado que el gremio hotelero ha reconocido con importantes premios y distinciones, Aire ofrece 8 tipos de habitaciones diferentes desde las que poder disfrutar de la recia naturaleza del lugar sin renunciar a ningún lujo. Ya sea desde las Burbujas, donde es posible asomarse al cielo estrellado de uno de los lugares con menor contaminación lumínica de Europa, o desde los Cubos con Vistas, que se asoman sobre los preciosos paisajes lunares de Bardenas Reales, este es el lugar perfecto para acercarse a un Parque Natural de leyenda, famoso por sus rutas de senderismo, sus itinerarios para bicicletas de montaña o sus caminos para el motor. Como guinda, vale la pena disfrutar de la experiencia gastronómica del hotel, que propone una carta basada en las verduras con denominación de origen de la zona y los ingredientes de kilómetro 0.

Para los que quieran explorar su lado más aventurero llega desde Francia una curiosa iniciativa de glamping: la iniciativa Cabanes de France se ha propuesto hacer realidad el gran sueño de la niñez de vivir en una casa del árbol. Aunque poseen alojamientos en distintas partes de la geografía gala, destaca como destino ideal para escapadas románticas La Campaulane, en la región de Provenza-Alpes-Costa Azul, a unas dos horas de Marsella. Este alojamiento sorprende con sus tiendas flotantes, que se elevan en el aire ofreciendo una vista 360º del paisaje boscoso y que además incluye acceso a spa privado. A la experiencia pueden sumarse actividades al aire libre en el entorno o sesiones de bienestar, entre otras muchas cosas.

No hay mejor destino para terminar nuestra ruta que los acantilados de Madeira, donde se encuentra el glamping Canto das Fontes. Elevado 100 metros sobre la Playa de Anjos, a poco más de media hora en coche desde Funchal, este glamping puede enorgullecerse de ser un enclave donde la paz de la naturaleza lo inunda todo mientras que, por su cercanía a pueblos como Punta do Sol (que presume de ser uno de los más soleados y encantadores de la isla), ofrece todo tipo de comodidades, acceso a la playa e interesantes recorridos turísticos. Al sonido de una cascada de 30 metros, que se ubica en las inmediaciones, se suma la granja orgánica que da sentido a este glamping y que pone a disposición de los huéspedes frutas, verduras y flores frescas de temporada. Poseen tres tipos distintos de alojamiento, desde la espaciosa Mango Yurt hasta las encantadoras Tipi Tents, perfectamente integradas en la exuberante naturaleza de Madeira.