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Madrid es Patrimonio

Además del Paisaje de la Luz, que incluye todo el eje del parque de El Retiro y el Paseo del Prado en el centro de la capital y con paradas tan destacadas como el Real Observatorio Astronómico, el Museo Nacional del Prado y el Real Jardín Botánico, la Comunidad cuenta con otros cuatro lugares incluidos en la lista de Patrimonio Mundial de la Unesco: Alcalá de Henares –la única Ciudad Patrimonio de la Unesco de la región–, el Monasterio y Real Sitio de San Lorenzo de El Escorial, el Paisaje Cultural de Aranjuez y el Hayedo de Montejo. Y, lo mejor, todos ellos están a menos de una hora de la capital. 

El Paisaje de la Luz, también conocido como Paseo del Prado y el Buen Retiro o Paisaje de las Artes y de las Ciencias, es un área de 200 hectáreas de extensión ubicada en el centro de Madrid, declarada Patrimonio Mundial de la Unesco el 25 de julio de 2021. Dentro de él los madrileños y visitantes disfrutan de algunas de las instituciones culturales, científicas y políticas más famosas de toda España: desde el Museo del Prado, el Reina Sofía o el Thyssen hasta el Congreso de los Diputados, el Ayuntamiento de Madrid y el Banco de España, pasando por el Real Jardín Botánico, la Casa de América y La Real Academia Española. La lista incluye más de 90 enclaves de interés, ya sea por su valor arquitectónico, histórico o popular, con monumentos como la fuente de Neptuno o de Cibeles, la Parroquia de San Jerónimo y, obviamente, el pulmón verde de Madrid, el Parque del Retiro. El patrimonio reunido en esta zona no puede compararse con ningún otro enclave a nivel mundial y repasa la historia de Madrid y de España desde el siglo XVI hasta la actualidad a través de los edificios, las obras y los testimonios reunidos en estas calles. La Unesco, además de valorar el increíble valor cultural del Paisaje de la Luz, también reconoció la importancia de los activos naturales de la zona, recordando también que el Paseo del Prado fue el primer paseo arbolado de Europa y el primero del mundo en hacerse accesible a todas las clases sociales, incluyendo a las más humildes de la Villa.

En el este de la Comunidad de Madrid se encuentra Alcalá de Henares, declarada Ciudad Patrimonio Mundial de la Unesco en 1998. Alcalá de Henares surgió gracias a la fundación en 1499 de la Universidad Complutense (Complutum fue el nombre con el que los romanos bautizaron a esta localidad) por parte del cardenal Jiménez de Cisneros, convirtiéndose en la primera ciudad universitaria planificada del mundo al erigirse según los preceptos de lo que se conoció como Civitas Dei o Ciudad de Dios. La Unesco reconoció no solo el patrimonio arquitectónico de esta ciudad, sino también la enorme aportación que desde ella se ha realizado a la cultura de la humanidad. Alcalá de Henares fue cuna de uno de los escritores más famosos de la historia universal de las letras, Miguel de Cervantes, que nació en la calle Mayor de la ciudad el 29 de septiembre del año 1547, y de las aulas de su Universidad han salido colosos como Lope de Vega, Francisco de Quevedo o Calderón de la Barca.

El Paisaje Cultural de Aranjuez, localidad situada en el extremo sur de la Comunidad de Madrid, fue declarado Patrimonio de la Humanidad en el año 2001. Desde que en 1489 los Reyes Católicos transformaron una casona de recreo en palacio, este Real Sitio se convirtió en residencia primaveral de los monarcas españoles hasta finales del siglo XIX, dotando a la localidad de una riqueza especial hasta que los alrededores del Palacio Real de Aranjuez fueron reconocidos por la Unesco. El Palacio, rodeado de un total de 111,23 hectáreas de jardines, fue erigido por Felipe II, quien encargó a Juan Bautista de Toledo un complejo de descanso primaveral de inspiración italiana. Monarcas posteriores como Felipe V y Fernando VI continuaron desarrollando tanto los jardines como el Palacio, que cuenta con espacios tan inusuales como el Gabinete Chinesco, decorado con 200 cuadros regalados por el Emperador de China a la reina Isabel II en 1846.

También reconocido por la Unesco, en su caso desde 1984, el Monasterio y Real Sitio de San Lorenzo de El Escorial se encuentra al noroeste de comunidad. Testigo de importantes eventos de la historia de España, este complejo incluye el palacio, el monasterio activo, la biblioteca, la basílica, los jardines y el Patio y Panteón de Reyes, donde descansan los restos de los monarcas españoles, tanto de los Austrias como de los Borbones. De nuevo obra de Juan Bautista de Toledo por encargo de Felipe II, El Escorial cuenta una superficie de 33 327 m2 y se encuentra situado en la ladera meridional del monte Abantos, presentando un impresionante trazado en forma de parrilla en memoria del suplicio infligido al mártir San Lorenzo con este instrumento. En la construcción de El Escorial se ven reflejadas tanto las influencias de los ideales clásicos y renacentistas como la enorme sobriedad que caracterizó el reinado del primer monarca de la historia que dominó territorios en los 5 continentes.

El último de los lugares reconocidos como Patrimonio Mundial en Madrid, esta vez en 2017, por su increíble valor natural es el bosque único de Hayedo de Montejo en la Reserva de la Biosfera Sierra del Rincón. Además de hayas, algunas de ellas ejemplares centenarios de más de 20 metros de altura, en este bosque de 250 hectáreas situado en el norte de la Comunidad de Madrid se encuentran 833 especies de flora como robles, cerezos salvajes, abedules, acebos o avellanos, y 194 especies de vertebrados como jabalíes, tejones, nutrias o águilas. El acceso al Hayedo de Montejo está limitado: los visitantes sólo pueden acceder acompañados de un guía y tras haber conseguido una acreditación, todo ello puede reservarse de forma gratuita. Los expertos recomiendan visitar el Hayedo en otoño, cuando las diferentes tonalidades de los árboles lo convierten en un escenario mágico.

En cualquier época, además de estas grandes joyas monumentales para los amantes de la arquitectura, la historia y el arte y de los numerosos atractivos naturales, Madrid ofrece opciones para todo tipo de viajero. Su vibrante escena gastronómica lo ha convertido en un destino de primer nivel para los amantes de la alta cocina y de la tradición. Ideal, también, para las compras, con boutiques de lujo en enclaves tan sofisticados como la Milla de Oro o Galería Canalejas, diseño independiente y local, tiendas centenarias y los mejores outlets.