Islandia: por qué está de moda
Inmensos glaciares, cascadas y géiseres que brotan de la tierra… Los numerosos atractivos naturales de Islandia han convertido al país nórdico en un destino de moda entre los viajeros amantes de la naturaleza. Solamente en 2016, esta isla de 330.000 habitantes superó los 1.750.000 visitantes (un 40% más que el año anterior). Descubrimos el éxito de Islandia con una galería de imágenes de seis espectaculares paisajes.

La piscina geotermal de Seljavallalaug, ubicada al sur del país, mide 25 metros de largo por 10 de ancho. Se trata de una de las menos conocidas de Islandia, por lo que es perfecta para disfrutar de un baño en plena naturaleza sin aglomeraciones.

Este lago glaciar de Jökulsárlón está situado en un campo de lava. Sus aguas cristalinas, a 37ºC, acogen cada año el festival de música Iceland Airwaves. Además, si te fijas bien, podrás ver cómo las focas asoman el hocico.

El juego de colores y tonalidades del paisaje de Landmannalaugar, ubicado cerca del volcán Hekla, ofrece unas espectaculares vistas aéreas. Esta zona ofrece varias rutas para senderistas, como la de Laugavegur, que pasa junto a la espectacular cascada de Skógafoss.

Con una extensión de 8.100km², Vatnajökull es el Parque Nacional más grande de Europa y abarca el segundo mayor glaciar de Islandia. Ofrece la posibilidad de realizar escaladas en hielo o paseos glaciares, aunque para llegar aquí es indispensable hacerlo en 4x4.

El valle de Þjorsardalur, situado al sur de Islandia, destaca por el contraste de sus paisajes, en el que el atractivo natural favorito de los visitantes son sus espectaculares cascadas. Destacan las cataratas de Háifoss y las de Þjófafoss, en la imagen.

En la ciudad pesquera de Höfn, al sureste, el surf es muy practicado. Aunque es raro que se asocie este deporte con Islandia, son muchos los aficionados al surf que vienen a hacerlo bajo la luz de la aurora boreal, cuando el agua puede rondar los cero grados en invierno.
La piscina geotermal de Seljavallalaug, ubicada al sur del país, mide 25 metros de largo por 10 de ancho. Se trata de una de las menos conocidas de Islandia, por lo que es perfecta para disfrutar de un baño en plena naturaleza sin aglomeraciones.